El hombre es un factor muy importante de contaminación en la cocina, cada centímetro cuadrado de piel humana contiene alrededor de 10 millones de microorganismos, y muchos representan una amenaza para la salud.
Si aceptamos que la causa principal de la contaminación de alimentos es la mala manipulación en la preparación de los mismos, muchas veces motivada por el desconocimiento, las personas encargadas de esta labor en la escuela, juegan un papel importante con sus hábitos para corregir esta situación, es más, su actitud es definitiva para evitar enfermedades y por tanto para la salud de los niños que comen en el establecimiento.
Esto hace que el manipulador, deba observar reglas básicas que tienen que ver con su estado de salud, su aseo personal, su vestimenta y sus prácticas durante la manipulación de los alimentos.
Por eso, una de las medidas más importantes y simples a la vez, es lavarse las manos no sólo antes de cocinar y antes de comer; sino también hay que hacerlo (y limpiar los utensilios de cocina) cuando se pasa de manipular alimentos crudos a alimentos cocidos.
Cuidado en el aseo
Dado que una de las medidas de prevención de la contaminación de los alimentos se fundamenta en la higiene del manipulador, es esencial su aseo personal. Por eso, si se dispone de agua en casa, es necesario tomar una ducha antes de ir a trabajar, con mayor razón si en el lugar de trabajo no existen facilidades para hacerlo.
El lavado de las manos siempre es antes de tocar los alimentos y luego de cualquier situación o cambio de actividad que implique que éstas se hayan contaminado, debe ser considerada la clave de oro del manipulador. De esa manera, el lavado de manos debe ser practicado antes de empezar a trabajar, al tocar alimentos crudos para después tocar otros alimentos o superficies que los puedan contactar. O luego de: utilizar el baño, rascarse la cabeza, tocarse el pelo, la cara, la nariz u otras partes del cuerpo, y de estornudar o toser aún con la protección de un pañuelo.
Un correcto LAVADO DE MANOS debe incluir estas etapas:
• Remangar el uniforme hasta el codo.
• Enjuagar las manos y el antebrazo hasta el codo.
• Frotar las manos con el jabón hasta que se forme espuma y extenderla de las manos hacia los codos.
• Cepillar cuidadosamente manos y uñas. El cepillo deberá permanecer en una solución desinfectante (cloro o yodo por ejemplo) mientras no se use se renovará al menos dos veces por turno. A falta de cepillo, el lavado con agua y jabón se hará al menos por 20 segundos restregando fuerte manos y uñas.
• Enjuagar bien al chorro de agua desde las manos hacia los codos.
• Lo ideal es poder secar las manos con toalla de papel. Los secadores de aire demoran en secar las manos, requieren más de un ciclo para lograrlo y casi siempre el manipulador termina de secarlas con la ropa. En los casos en que la escuela no disponga de toallas de papel, se debe contar con una toalla que permanezca siempre limpia y sea renovada cuando esté muy mojada o su estado de limpieza no sea óptimo.
• Desinfectar las manos en una solución apropiada de ser necesario. Puede también utilizarse alcohol con este propósito.
El agua utilizada para el lavado de manos, además de ser potable, deberá ser lo más caliente posible para garantizar una mejor acción del jabón
Condiciones del personal que manipula alimentos
Toda persona que prepare alimentos dentro de un establecimiento educativo debe cumplir con estas condiciones:
Estado de salud
Si el manipulador se encuentra enfermo de las vías respiratorias, del estómago o si tiene heridas en las manos o infecciones en la piel, lo más recomendable es evitar durante ese tiempo la manipulación de alimentos, por la alta probabilidad de contaminarlos con gérmenes. En ese caso, conviene que la persona desempeñe otros oficios diferentes a la elaboración de alimentos.
Si es inevitable trabajar mientras se sufre una enfermedad respiratoria, es necesario que el manipulador evite hábitos que, aún sin estar enfermo, no debería realizar mientras manipula los alimentos, ya que por ejemplo toser o estornudar e incluso hablar sobre los alimentos, puede significar que bacterias, como el estafilococo dorado, que viven en la boca, la nariz o la garganta, puedan caer sobre el alimento entre las gotitas y contaminarlo. ¡Con mayor razón si se está enfermo!.
La acción de toser o estornudar, a veces irremediable, implica abstenerse de hacerlo sobre los alimentos. Para eso, es necesario cubrirse la boca con papel desechable o con las manos, y en cualquiera de los dos casos, proceder a un lavado completo de las mismas, antes de volver a tocar los alimentos o las superficies que los contactan.
Así mismo, si el manipulador debe permanecer necesariamente preparando alimentos cuando tiene heridas en las manos, deberá cubrirlas con guantes o con una banda protectora, los que deben ser cambiados con la frecuencia que demande la operación que realiza.
Como parte de los controles de salud del manipulador, las autoridades exigen a veces la práctica de exámenes médicos o de laboratorio, pero es sin duda el estar debidamente capacitado para la manipulación higiénica el requisito más importante para ejercer este oficio. Aquellos exámenes no obstante, pueden ser practicados, si hay razones de tipo clínico o epidemiológico así lo aconsejan.
Vestimenta
La ropa de uso diario significa una oportunidad para llevar las bacterias adquiridas en el medio ambiente, y que se alojan en la indumentaria de calle y en el calzado, al lugar donde se procesan los alimentos, por ello se aconseja el uso de un uniforme o una ropa especial destinada a la preparación. La circulación de microbios en el aire, es la razón principal para usar una indumentaria especial de trabajo, que esté siempre limpia y que incluya:
• una gorra, red o ambas, que cubriendo totalmente el cabello, evita su caída sobre los alimentos.
• un guardapolvo (puede ser una chaqueta y pantalón o un mameluco) que, utilizado solamente dentro del área de trabajo, protege a los alimentos y superficies de la contaminación.
• un barbijo, que debidamente usado, ayuda a proteger los alimentos de gotitas provenientes de la nariz o la boca, cuando se preparan alimentos para grupos de riesgo como niños, ancianos o enfermos.
• un delantal plástico, para operaciones que requieren de su protección.
• Guantes, para acciones específicas, especialmente en manipulación de productos cocidos listos para el consumo, si ésta no puede hacerse con utensilios.
• Calzado, o botas adecuadas si las manipulaciones las requieren.
La indumentaria debe ser de color blanco o en su defecto de color claro para visualizar mejor su estado de limpieza y nunca deberá ser utilizada en áreas diferentes a la de proceso o de los vestidores.
Hábitos deseables
Además de los hábitos referidos al aseo personal y a la vestimenta, el manipulador de alimentos siempre debería acostumbrarse a:
• Lavar prolijamente utensilios y superficies de preparación antes y después de usarlos.
• Lavar prolijamente vajilla y cubiertos antes de usarlos para servir.
• Tomar platos y fuentes por los bordes, cubiertos por el mango, vasos por el fondo y tasas por el asa.
• Mantener el aseo más prolijo en su cocina o expendio y alrededores.
• Lavarse las manos antes de arreglar la mesa.
Hábitos indeseables
Los hábitos que sí tiene que evitar a toda costa el manipulador de alimentos incluyen:
• Hurgarse o rascarse la nariz, la boca, el cabello, las orejas, o tocarse granitos, heridas, forúnculos, quemaduras o vendajes, por la facilidad de propagar bacterias a los alimentos en preparación. De tener que hacerlo, acudir a un inmediato lavado de manos.
• Fumar, comer, mascar chicle, beber o escupir en las áreas de preparación de alimentos. Estos son hábitos inadmisibles.
• Usar uñas largas o con esmalte. Esconden gérmenes y desprenden partículas en el alimento.
• Usar anillos, esclavas, pulseras, aros, relojes u otros elementos que además de “esconder” bacterias, pueden caer sin darse cuenta en los alimentos o en equipos y además de causar un problema de salud al consumidor, hasta pueden causar un accidente de trabajo!.
• Tomar alimentos o ingredientes con las manos en vez de usar utensilios.
• Utilizar la vestimenta como paño para limpiar o secar.
• Usar el baño con la indumentaria de trabajo puesta. Resulta muy fácil que la ropa se contamine en este lugar y luego transportar los gérmenes al lugar de proceso.
Requisitos para visitantes
Las personas que visitan los lugares de preparación de alimentos y en particular las áreas de proceso, deberán llevar la indumentaria requerida acorde con lo aconsejado para el personal manipulador y deberán además cumplir con las diversas disposiciones de higiene personal señaladas para la manipulación.
Lo mismo sucede con los alimentos que los niños ingresan a la escuela. En ese caso, los comestibles que se llevan desde la casa deben estar protegidos, para evitar que se contaminen y para impedir que tengan contacto con los productos que se utilizan en el sector de preparación y se produzca un caso de contaminación cruzada.
sábado, 27 de marzo de 2010
sábado, 20 de marzo de 2010
COMENZARON LAS CLASES
¿QUÉ ES EL S.A.E?
Breve reseña:
El Servicio Alimentario Escolar ( SAE) está diseñado para brindar los alimentos indispensables que cubran las necesidades nutricionales de la población escolar de alta vulnerabilidad, y/o en riesgo social de la Provincia de Buenos Aires.
Objetivos
• Proteger y mejorar el estado nutricional de niños y jóvenes en edad escolar.
• Valorar la inclusión del Servicio Alimentario como instancia pedagógica del Proyecto Educativo Institucional, permitiendo el desarrollo de una cultura alimentaria y promoviendo la adquisición de hábitos que favorezcan la construcción de una personalidad individual y social.
• Mejorar la calidad de la oferta educativa en el nivel provincial.
Población beneficiaria
1.525.000 Alumnos de Educación Inicial, Educación General Básica, Educación Especial y Centros Educativos Complementarios son atendidos por alguna o algunas de las cuatro modalidades de SAE
En el 2005 se ha extendido la prestación del DMC (Desayuno y Merienda Completo) a 3° y 4° año de E.G.B.
100.000 módulos son destinados a la atención de la población posprimaria de la provincia de Buenos Aires.
Cerca de 400.000 alumnos se han incorporado en 2005 como beneficiarios del Desayuno Merienda Completo.
Total: 2.569.947 prestaciones diarias.
Consejos para los que trabajan en la cocina de una escuela
Para los manipuladores de alimentos que trabajan en establecimientos educativos constituye un deber que conozcan todas las buenas prácticas de manipulación.
Tanto en la cocina de la escuela como en un comercio que funcione dentro de ella, las fuentes de contaminación de los alimentos pueden ser: la materia prima, los procesos de elaboración, o la posterior manipulación, en estos casos, la falta de higiene puede afectar a cualquiera de las tres.
Las enfermedades transmitidas por alimentos afectan a los sectores más susceptibles (como son los niños, los ancianos, las mujeres embarazadas y las personas enfermas) y se sabe que cerca de dos terceras partes de las epidemias por esta causa, ocurren por consumo de alimentos en restaurantes, cafeterías, comedores escolares, y en las mismas viviendas.
Debido a ello, las personas encargadas de cocinar para estos grupos deben extremar sus cuidados en la manipulación. Es importante que conozcan sobre las Buenas Prácticas de Manufactura, los daños a la salud que producen las enfermedades transmitidas por alimentos, el análisis de riesgo, y los puntos críticos en el proceso de elaboración.
Higiene en la escuela
En primer lugar, los manipuladores deben tener en cuenta que es fundamental cuidar su higiene personal. Las manos y uñas esconden gérmenes que se multiplican sobre los alimentos y son los que nos pueden causar las enfermedades. Así mismo su tarea es garantizar la higiene de los materiales con los que se manipulan los alimentos: utensilios, envases y superficies. Es aconsejable, para eso, utilizar elementos de preparación confeccionados con materiales que sean de fácil limpieza o descartables.
En la industria de la carne, por ejemplo, está prohibido el uso de elementos de madera porque es un material orgánico muy poroso que retiene la humedad y es muy difícil de limpiar. Por eso, una buena medida es no utilizar las tablitas de madera en la cocina de la escuela, pero reemplazarlas por las de plástico no es lo aconsejable, ya que éste también es un material poroso y, por lo tanto, difícil de limpiar. Mejor se recomienda que sean de metal.
También debe tenerse en cuenta la utilización de elementos con aristas redondeadas, y no aquellos que tienen partes inaccesibles o que no pueden ser limpiadas; en cuanto a las procesadoras, son preferibles aquellas completamente desmontables y que permiten limpiar todas sus piezas.
Una vez lavados, los elementos deben ser secados y guardados en lugares que estén limpios. Evitar los escurridores de platos y de cubiertos que no tienen un buen drenaje y en los que se acumula agua y, en ella, microbios.
Breve reseña:
El Servicio Alimentario Escolar ( SAE) está diseñado para brindar los alimentos indispensables que cubran las necesidades nutricionales de la población escolar de alta vulnerabilidad, y/o en riesgo social de la Provincia de Buenos Aires.
Objetivos
• Proteger y mejorar el estado nutricional de niños y jóvenes en edad escolar.
• Valorar la inclusión del Servicio Alimentario como instancia pedagógica del Proyecto Educativo Institucional, permitiendo el desarrollo de una cultura alimentaria y promoviendo la adquisición de hábitos que favorezcan la construcción de una personalidad individual y social.
• Mejorar la calidad de la oferta educativa en el nivel provincial.
Población beneficiaria
1.525.000 Alumnos de Educación Inicial, Educación General Básica, Educación Especial y Centros Educativos Complementarios son atendidos por alguna o algunas de las cuatro modalidades de SAE
En el 2005 se ha extendido la prestación del DMC (Desayuno y Merienda Completo) a 3° y 4° año de E.G.B.
100.000 módulos son destinados a la atención de la población posprimaria de la provincia de Buenos Aires.
Cerca de 400.000 alumnos se han incorporado en 2005 como beneficiarios del Desayuno Merienda Completo.
Total: 2.569.947 prestaciones diarias.
Consejos para los que trabajan en la cocina de una escuela
Para los manipuladores de alimentos que trabajan en establecimientos educativos constituye un deber que conozcan todas las buenas prácticas de manipulación.
Tanto en la cocina de la escuela como en un comercio que funcione dentro de ella, las fuentes de contaminación de los alimentos pueden ser: la materia prima, los procesos de elaboración, o la posterior manipulación, en estos casos, la falta de higiene puede afectar a cualquiera de las tres.
Las enfermedades transmitidas por alimentos afectan a los sectores más susceptibles (como son los niños, los ancianos, las mujeres embarazadas y las personas enfermas) y se sabe que cerca de dos terceras partes de las epidemias por esta causa, ocurren por consumo de alimentos en restaurantes, cafeterías, comedores escolares, y en las mismas viviendas.
Debido a ello, las personas encargadas de cocinar para estos grupos deben extremar sus cuidados en la manipulación. Es importante que conozcan sobre las Buenas Prácticas de Manufactura, los daños a la salud que producen las enfermedades transmitidas por alimentos, el análisis de riesgo, y los puntos críticos en el proceso de elaboración.
Higiene en la escuela
En primer lugar, los manipuladores deben tener en cuenta que es fundamental cuidar su higiene personal. Las manos y uñas esconden gérmenes que se multiplican sobre los alimentos y son los que nos pueden causar las enfermedades. Así mismo su tarea es garantizar la higiene de los materiales con los que se manipulan los alimentos: utensilios, envases y superficies. Es aconsejable, para eso, utilizar elementos de preparación confeccionados con materiales que sean de fácil limpieza o descartables.
En la industria de la carne, por ejemplo, está prohibido el uso de elementos de madera porque es un material orgánico muy poroso que retiene la humedad y es muy difícil de limpiar. Por eso, una buena medida es no utilizar las tablitas de madera en la cocina de la escuela, pero reemplazarlas por las de plástico no es lo aconsejable, ya que éste también es un material poroso y, por lo tanto, difícil de limpiar. Mejor se recomienda que sean de metal.
También debe tenerse en cuenta la utilización de elementos con aristas redondeadas, y no aquellos que tienen partes inaccesibles o que no pueden ser limpiadas; en cuanto a las procesadoras, son preferibles aquellas completamente desmontables y que permiten limpiar todas sus piezas.
Una vez lavados, los elementos deben ser secados y guardados en lugares que estén limpios. Evitar los escurridores de platos y de cubiertos que no tienen un buen drenaje y en los que se acumula agua y, en ella, microbios.
domingo, 7 de marzo de 2010
PROGRAMA DEL CURSO
1. Síntesis introductoria:
El objetivo del curso es que los cursantes reconozcan la importancia social de su rol, en tanto que una correcta manipulación de los alimentos actúa como medio de prevención y promoción de la salud. Asimismo, analizarán su desempeño como trabajadores y la necesidad de conocer los deberes y obligaciones correspondientes. También, se abordará la normativa específica que rige la manipulación de alimentos en el país y en la jurisdicción.
2. Expectativas de logro:
Finalizado el módulo el cursante estará capacitado para el/la:
• Reconocimiento de la incidencia de la alimentación en la preservación de la salud.
• Identificación de los peligros físicos, químicos y biológicos que alteran los alimentos.
• Adquisición de procedimientos operativos estandarizados de higiene y desinfección.
• Realización de buenas prácticas de manufactura respetando las normas de seguridad, bioseguridad e higiene.
• Interpretación del marco legal normativo que rige la manipulación de alimentos y sus derechos y obligaciones laborales.
3. Contenidos:
Alimentos: definición, clasificación y composición.
Peligros físicos, químicos y biológicos en los alimentos.
Generalidades de microbiología alimentaria.
Enfermedades transmitidas por alimentos: definición, clasificación, vías de transmisión,
Formas de prevención. Alimentos involucrados. Contaminación cruzada.
Buenas prácticas de manufactura aplicadas a: la higiene del personal, los procesos, el uso de agua segura, la materia prima, aditivos, ingredientes, producto intermedio, producto final, el equipamiento, los utensilios, la infraestructura y el ambiente de trabajo.
Procedimientos operativos estandarizados de higiene y desinfección: materiales y métodos.
Manejo integrado de plagas: materiales y métodos. Manejo responsable de residuos.
Métodos de conservación y elaboración de alimentos: físicos, químicos y biológicos.
Envases de alimentos: materiales
El objetivo del curso es que los cursantes reconozcan la importancia social de su rol, en tanto que una correcta manipulación de los alimentos actúa como medio de prevención y promoción de la salud. Asimismo, analizarán su desempeño como trabajadores y la necesidad de conocer los deberes y obligaciones correspondientes. También, se abordará la normativa específica que rige la manipulación de alimentos en el país y en la jurisdicción.
2. Expectativas de logro:
Finalizado el módulo el cursante estará capacitado para el/la:
• Reconocimiento de la incidencia de la alimentación en la preservación de la salud.
• Identificación de los peligros físicos, químicos y biológicos que alteran los alimentos.
• Adquisición de procedimientos operativos estandarizados de higiene y desinfección.
• Realización de buenas prácticas de manufactura respetando las normas de seguridad, bioseguridad e higiene.
• Interpretación del marco legal normativo que rige la manipulación de alimentos y sus derechos y obligaciones laborales.
3. Contenidos:
Alimentos: definición, clasificación y composición.
Peligros físicos, químicos y biológicos en los alimentos.
Generalidades de microbiología alimentaria.
Enfermedades transmitidas por alimentos: definición, clasificación, vías de transmisión,
Formas de prevención. Alimentos involucrados. Contaminación cruzada.
Buenas prácticas de manufactura aplicadas a: la higiene del personal, los procesos, el uso de agua segura, la materia prima, aditivos, ingredientes, producto intermedio, producto final, el equipamiento, los utensilios, la infraestructura y el ambiente de trabajo.
Procedimientos operativos estandarizados de higiene y desinfección: materiales y métodos.
Manejo integrado de plagas: materiales y métodos. Manejo responsable de residuos.
Métodos de conservación y elaboración de alimentos: físicos, químicos y biológicos.
Envases de alimentos: materiales
miércoles, 3 de marzo de 2010
IMPORTANTE
LOS ALUMNOS QUE HAYAN FINALIZADO EL CURSO DE COCINERO PARA COMEDOR ESCOLAR EN EL SEGUNDO CUATRIMESTRE DEL AÑO 2009, PUEDEN PASAR A BUSCAR LOS CERTIFICADOS DEFINITIVOS
lunes, 1 de marzo de 2010
COMIENZAN LAS CLASES
El próximo lunes 8 de marzo comienzan las clases en el CFP 402, nuestro curso a partir de este año se va a realizar todos los lunes, miercoles y viernes desde las 8 hasta las 11,30 hs.
A todos los nuevos alumnos les doy la Bienvenida, esperando muchos exitos en la cursada
A todos los nuevos alumnos les doy la Bienvenida, esperando muchos exitos en la cursada
Rubén Aranda
Instructor
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